Foto: Botanic El Serrat, zonas de riego (clicar para ampliar)
Primero es recomendable elegir las especies autóctonas que se adaptan perfectamente al entorno y en la mayor variedad posible, porque además de dar un toque multicolor resistirán mejor a plagas y enfermedades.
Para ello y teniendo en cuenta los principios de la xerojardinería, es conveniente agrupar las especies en tres zonas según sus necesidades de riego, evitando así el riego indiscriminado que supondría un alto consumo de agua, que es básicamente lo que se desea evitar.
Zona de riego escaso:
Zona de riego moderado:
Zona de riego abundante:
Otros factores a tener en cuenta:
Por otro lado, como algunas especies requieren sombra o semisombra es conviente plantarlas debajo de los árboles para que se la proporcionen, evitando su deshidratación en épocas estivales.
En la plantación hay que tener en cuenta el volumen que adquirirán algunas especies en su crecimiento posterior, efectuándola con las distancias adecuadas.
Por último decir que estas son unas pequeñas pautas de ayuda ya que cada uno puede diseñar su jardín de la manera y con las especies que sean de su agrado.
Una vez hemos hecho el diseño de nuestro jardín pasaremos a la selección de las especies vegetales que queremos plantar y a su distribución.
Primero es recomendable elegir las especies autóctonas que se adaptan perfectamente al entorno y en la mayor variedad posible, porque además de dar un toque multicolor resistirán mejor a plagas y enfermedades.
Para ello y teniendo en cuenta los principios de la xerojardinería, es conveniente agrupar las especies en tres zonas según sus necesidades de riego, evitando así el riego indiscriminado que supondría un alto consumo de agua, que es básicamente lo que se desea evitar.
Zona de riego escaso:
Deberá tener árboles, arbustos y plantas autóctonas, así como cactus y crasas, que no necesitan apenas riego y que se procurará que sea la zona más extensa del jardín.
Además el cuidado de esta zona será el mínimo, por lo que reduciremos los trabajos de mantenimiento notablemente.
Zona de riego moderado:
Se pueden plantar otras especies más exigentes como bulbos y rizomas y también arbustos de flor, siempre que se adapten bien a las condiciones climáticas, así como plantas tapizantes en sustitución del césped.
Zona de riego abundante:
Procuraremos que esta sea la parte más pequeña del jardín, con plantas de flor y césped que tienen mayores necesidades de riego y también un cuidado más intensivo. Por eso si esta zona es pequeña, podremos mantenerla fácilmente.
Colocar borduras también facilitará la eficiencia del riego.
Otros factores a tener en cuenta:
También es importante la plantación de setos o masas de arbustos en el perímetro, para que sirvan de excelentes cortavientos.
Por otro lado, como algunas especies requieren sombra o semisombra es conviente plantarlas debajo de los árboles para que se la proporcionen, evitando su deshidratación en épocas estivales.
En la plantación hay que tener en cuenta el volumen que adquirirán algunas especies en su crecimiento posterior, efectuándola con las distancias adecuadas.
Por último decir que estas son unas pequeñas pautas de ayuda ya que cada uno puede diseñar su jardín de la manera y con las especies que sean de su agrado.