Después de llover, cuando vuelve a salir el sol, me doy una vuelta por el jardín para observar esas gotas de agua que han quedado suspendidas en las hojas o en los pétalos de las flores, que brillan intensamente con la luz.
Veo algunas incluso en los diminutos cladodios de la esparraguera (Asparagus acutifolius, L).
Unas fotos estupendas. Hay que estar ahí para hacerlas. Enhorabuena.
ResponderEliminarMuchísimas gracias!!
EliminarUn abrazo.
Son pequeños, hermosos, y efímeros, pendientes de diamantes que nos regala la naturaleza. Felicidades por las fotos, Montse. Saludos y un abrazo desde El Terrao.
ResponderEliminarMe gusta como lo has descrito, Rafael.
EliminarUn gran abrazo!!
Preciosas gotas de lluvia, me encantan. Besos.
ResponderEliminarGracias Teresa ¡Mil besos!
EliminarMontse, que bonitas, y en el momento justo, preciosas.
ResponderEliminarBona setmana.
Me alegro que te gusten, María Dolors.
EliminarUn petonet.
ResponderEliminarOlá amiga,vim retribuir sua carinhosa visita ao meu cantinho.
Fiquei feliz por seguir-me!!!
Obrigada,volte sempre e pegue o meu selinho de agradecimento!
Beijos Marie.
Soy yo la agradecida de que visitaras mil blog!
EliminarUn beso, Marie :)
Esta foto me gusta mucho también, enhorabuena.
ResponderEliminarUn beso.
¡Qué bien que te guste!
EliminarBesitos.
Espectaculares, montse
ResponderEliminarMuchísimas gracias María!!
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