JACINTERA, el cultivo hidropónico

El cultivo de jacintos (Hyacinthus orientalis, L.) en agua o cultivo hidropónico se realiza en unos recipientes especiales llamados jacinteras. Me regalaron una hace un par o tres de años y tal como prometí hoy hablaremos de ellas y de algo tan importante como el cultivo hidropónico.

Las jacinteras son recipientes de vidrio que presentan un estrechamiento de la parte superior formando una copa, como puede verse en las fotografías.

Los bulbos de Jacinto tienen forma de peonza y están revestidos exteriormente de escamas. El bulbo se coloca en la jacintera con la parte ancha hacia abajo, sin que esté en contacto con el agua, en la parte estrecha, la superior, de la jacintera. De este modo las raíces se desarrollarán en el agua, a lo largo del recipiente, pero el bulbo permanecerá seco.

Se coloca un trozo de carbón vegetal o una cucharadita de sal común en el agua y ésta se cambiará cada quince días, procurando no mojar el bulbo ya que puede llegar a pudrirse.
En pocos días ya veremos las raíces y como se abre el bulbo por la parte superior mostrando primero las hojas y finalmente el jacinto en flor.

Es una forma de disfrutar de jacintos en casa sin tener terraza, ni macetas, ni jardín, lo que nos lleva a hablar del cultivo hidropónico, algo que me parece sumamente interesante.

El cultivo hidropónico se basa en plantaciones que prescinden de la tierra, sustituyéndola por sustratos varios o sencillamente sólo con agua enriquecida con soluciones nutritivas. 

Por extraño que nos parezca no es una técnica de nueva invención, su origen se remonta a los inicios de la civilización helénica, los famosos jardines colgantes de Babilonia, que se basaban en alimentarse del agua que corría por medio de canales, son un claro ejemplo.

En la actualidad y gracias a los avances técnicos y químicos, esta técnica de cultivo podría ser la solución para combatir el hambre en el mundo y una esperanza de futuro para la falta de alimentos que se avecina, una forma de producción que podría abastecer a la creciente superpoblación del planeta.

Este tipo de cultivo, la hidroponía, supone una agricultura más ecológica y sostenible ya que no requiere grandes extensiones de tierra fértil con la posibilidad de realizar cultivos en tierras desérticas, ni grandes cantidades de agua para el riego, ni uso de pesticidas a gran escala ante la ausencia de malas hierbas o plagas. En definitiva, un cultivo que nos da la posibilidad de vivir en un mundo más ecológico y productivo.