DIONAEA y DROSERA plantas carnívoras


Lo primero que vi al llegar al Jardí Botànic Marimurtra fueron las plantas carnívoras que había en la entrada. Interesantísimo poder ver estas curiosas plantas de cerca y mucho más encontrar a la pequeña Dionaea preparada para el desayuno.

Las plantas carnívoras, mejor dicho insectívoras, son aquellas que obtienen parte del nutriente que necesitan, no todo, mediante la capacidad de atrapar y digerir organismos del género animal mayoritariamente insectos. Los mecanismos de captura son diferentes según los géneros, ya sea a través de pinzas, como la Dionaea, de pelos pegajosos, como la Drosera o de trampas como la Nepenthes y la Serracenia, por citar unos cuantos.

Hay una docena de géneros y unas 600 especies de plantas carnívoras y fue Charles Darwin el primero que escribió un tratado sobre ellas.

Dionaea muscipula, un género monotípico de la familia Droseraceae, conocida como dionea atrapamoscas o venus atrapamoscas, que se encuentra en pantanos y humedales pobres en nitrógeno, especialmente en Carolina del Norte y Carolina del Sur (EEUU) y que se cultiva como planta de interior en todo el mundo, por el atractivo de ser una planta carnívora.



Se trata de una planta pequeña formada por un roseta de 8 o 10 hojas de la que surge un tallo subterráneo a modo de bulbo. Las hojas más largas, después de la floración forman unas palas divididas en dos regiones. 

Un peciolo plano en forma de corazón y un par de lóbulos abisagrados en la vena central, que se cierran rapidamente estimulados por el contacto de la presa con los tricomas o pelos que se encuentran en los lóbulos y que son la trampa que los atrapa, los bordes festoneados por cilios que se entrelazan evitan que la presa escape. Una vez dentro será digerida mediante las enzimas que segregan las glándulas de los lóbulos, este proceso puede durar 10 días, tras los cuales la presa queda reducida a una cáscara y los lóbulos vuelven a abrirse para cazar de nuevo.



Esta es la Drosera capensis, L. orginaria de la Provincia del Cabo en Sudáfrica y también muy cultivada por ser una planta carnívora.

Es una planta perenne, de unos 30 cms de altura y rizomatosa. Las hojas lineares están recubiertas de vello, llamado tricoma, que segregan el mucílago pegajoso que se ocupa de atrapar a los insectos, digeridos después por las enzimas de la planta.
Tiene flores, en escapos, que duran un sólo día, de color rosa que se abren por la mañana y se cierran por la noche.


Comúnmente se conoce como "Rocío del sol" que deriva del griego "drosos" y del latín "ros solis" haciendo referencia a las gotas de mucílago pegajoso que rodean las hojas y que recuerdan el rocío de la mañana.


En la foto vemos la planta completa, pero no hagáis caso del cartel, el nombre es de otra planta carnívora que seguramente estaba plantada detrás y que aún no había nacido, la Sarracenia, también bastante conocida.



Aquí vemos, a la izquierda de la foto sobre el muro, la zona de helechos y plantas carnívoras que hay en la entrada-salida del Jardí Botànic Marimurtra.

4 comentarios:

  1. Hola Montse. Compré una dionaea y me duró pocos días, se murió, era muy pequeña y las hojitas se marchitaban y descomponían. Igual les faltaba comer carne.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues sí, igual les faltaba el bocadillo de salchichón, jeje.
      Yo nunca he tenido ninguna planta carnívora, me dan un poco de respeto, por decirlo de alguna manera :)
      Muchos besos.

      Eliminar
  2. no son plantasw especialmente grandes o bonitas pero desde siempre me han atraido las carnivoras... sera el morbillo de ver caer al incauto incesto... jajaja sangre sangre jajaja

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gran parte de su atractivo es el morbo que da pensar que comen carne, pero a mi me da repelús, jeje.
      Un beso.

      Eliminar

Bienvenid@ a Botanic Serrat
y muchas gracias por dejar tu comentario.