Thymus vulgaris L.
Perteneciente al género Thymus, de la familia de las Lamiaceae o Labiatae , el Thymus vulgaris L. es el más conocido y empleado como condimeno y como planta medicinal.
El nombre Tymus procede del griego que significa “perfumar” y que alude al intenso aroma de la planta.
Su origen se remonta al antiguo Egipto en donde era utilizado para los embalsamientos. Los griegos lo usaban para aromatizar los baños y quemar incienso de tomillo en sus templos, pero su expansión por Europa se debe a los romanos.
Se cultiva en Europa central y meridional y que puede encontrarse asilvestrado en casi toda la Península Ibérica, existiendo varias especies, y principalmente en zonas mediterráneas secas de suelo calcáreo.
Es un pequeño arbusto, leñoso y poliforme, de 10 a 40 cms de altura, con numerosas ramificaciones leñosas y compactas de color parduzco o blancoaterciopelado.
Hojas lineares, oblondas y sin cilios, con los márgenes enrollados y tomentosas por el envés.
Flores axilares y agrupadas en la extremidad de las ramas, formando capículo terminal en inflorescencia de pequeñas flores rosado-violetas blanquecinas y corola más larga que el cáliz. Florece a partir de Marzo hasta el verano y desprende un penetrante olor aromático que atrae a avispas y abejas.
En jardinería se utiliza como bordura, pequeños macizos y como cubridora de huecos en rocalla, mientras que su cultivo como planta medicinal para la obtención de aceites esenciales se realiza en filas o eras.
Plantar al sol ya que resiste la sequía y resguardar de la humedad y las heladas invernales.
No precisa ningún tipo especial de abono y su riego debe ser más bien escaso, incluso con las altas temperaturas estivales.
El tomillo es uno de los condimentos principales en la gastronomía mediterránea, empleándolo en adobos, salsas, guisos de carnes y aves para darles aroma y en sopas, como la conocida “sopa de farigola” catalana de la que os daré la receta.
Como planta medicinal, sus hojas y sumidades son estimulantes, antiespasmódicas, balsámicas, antisépticas, cicatrizantes y oxidantes. El aceite esencial, que se obtiene del timol, se utiliza en farmacia y herbolarios como antiséptico, tónico y cicatrizante.
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Ver receta : Pescado al romero y tomillo
9 comments
Me chifla el tomillo, su olor y las fotos que le has hecho.
ResponderEliminar¿Conoces ese dicho "per la gola, farigola"? (Para la garganta, tomillo)
Beso
desde aquí se huelen tus bonitas fotos de hoy¡¡¡
ResponderEliminarme encanta el olor del tomillo, tan a campo¡¡
ésta también es tierra de tomillos, así que en mis arriates crecen que dan gusto... y aguantan el verano como valientes¡¡¡
un abrazo
Me encanta el olor a tomillo, sobre todo cuando caminas en verano por los pinares secos y al mínimo roce empieza a fluir su aromático olor!! También me gusta pasar la mano y agarrarlo un poco, luego se queda el olor en durante largo tiempo... :)
ResponderEliminarBesos
Y lo bien que huele!!!!
ResponderEliminarElvira, las dos primeras fotos son de la primavera ¡estaba precioso! y justamente la primera la incluí en la "galería fotográfica", de eso ya hace tiempo... así que fíjate lo que he tardado en lucir al perfumado tomillo!
ResponderEliminarConozco la cita popular y se refiere a las propiedades antisépticas que posee que van muy bien para las afecciones de la garganta, aunque supongo que ya lo sabes. Mi madre tiene mucha afición a esta planta, cosa que no me extraña, dadas sus cualidades y yo sigo sus pasos.
Besitos.
Me encanta lo que has dicho, Pilar, que "huelen tan a campo", jaja.. pienso lo mismo, tienen un perfume característico muy agradable.
ResponderEliminarAhora me imagino que estarán algo pachuchos, como mis matas, con estos fríos ¡deseando estoy de que vuelva a florecer!, aunque cuando está seca la planta es cuando más olor hace.
Muchos besos campestres!
¡Yo hago igual, Ramuol!, me resulta inevitable frotar la planta y llevarme las manos a la nariz para sentir su olor, cada vez que paso por su lado. Me pasa con el tomillo y con el romero, no lo puedo evitar.
ResponderEliminar¡Es tan agradable y, como ha dicho Pilar, huele tan a campo!
Muchos besos.
Gargon, yo creo que es lo que más nos gusta a todos, su olor.
ResponderEliminar¡Ummmm, ya casi lo puedo sentir!
Qué bueno el tomillo como condimento, es de mis preferidos.
ResponderEliminarBesos maestra,
Bienvenid@ a Botanic Serrat
y muchas gracias por dejar tu comentario.