El otoño del AGAPANTO
Hoy ha dado comienzo el otoño, en el hemisferio norte, una estación en la que la naturaleza se prepara para la llegada del invierno.
Algunas plantas han llenado de alegría y color nuestro jardín desde la primavera hasta ahora, como es el caso del Agapanto o Flor del Amor (Agapanthus africanus)
En la primera fotografía, es del mes de Junio, al inicio del verano cuando asomaba la inflorescencia aún protegida por la espata o bráctea que la envuelve. Un hermoso inicio.
La segunda fotografía es de Septiembre, de hace pocos días, y vemos como la umbela que sostenía la floración ha quedado convertida en una formación, que podríamos llamar esquelética y nos muestra las cápsulas de sus frutos.
El otoño del Agapanto no es un final, es un punto y aparte que dará paso a una época de reposo durante el que nos alegrará el jardín con sus bonitas y verdes hojas.
La Naturaleza no tiene un principio y un fin, es el contínuo ciclo de la vida.
24 comments
La verdad es que gusta más la primera que la segunda foto pero me alegro mogollón de que por fin haya llegado el otoño, bieeeeeeeeeeeeen!!!
ResponderEliminarEs cierto, Montse, cambian los colores, las formas, cambia el paisaje pero todo tiene en si su propia belleza y tambien la necesidad de descanso, renovacion, para volver luego a empezar
ResponderEliminarCariños
¡Hay flores que se quedan en los huesos,
ResponderEliminarosamenta en su nombre tan florido!
¡Vivan las diferencias de las flores!
Pobrecillo el agapanto, se ha quedado escuálido. Besos
ResponderEliminarBellísimas las flores del Agapanto!! Recuerdo haberlo visto en los jardines de algunas ciudades cuando he viajado a la costa. Por el interior es una planta que no he visto nunca así que imagino que necesitará un clima más bien suave...
ResponderEliminarCreo que te has adelantado Montse, el otoño este año llega mañana día 23, jeje, como cambia de una año para otro no hay quien se aclare, verdad?
Muchos besos guapa!!
Hola Montse, qué preciosidad de flor, la 1ª vez que supe de su existencia fué hace muchos años en una galería de arte aquí en Zaragoza donde fui a ver una exposición, su autora los pintaba casi en exclusivo. Luego las vi en Comillas, Cantabria en todo su esplendor y me parecieron preciosísimas, aquí no se dan bien.
ResponderEliminarComo dice Raoul el otoño empezará el 23, pero quién nos quita la ilusión de mantener el 21 para el equinoccio? pásate por casa.
Besicos
me encanta el otoño ¡¡¡ el momento en que todo cambia para renacer de nuevo¡¡¡ y el bosque nos regala tantas sensaciones únicas... es una temporada que se puede ver, oler, probar, tocar y oir ¿no te parece? aquí, después de nuestra larga sequía... ver el verde intenso de nuevo es una maravilla¡¡¡
ResponderEliminarbesotes
seguramente la de abajo se siente victoriosa por haber dado su belleza :D
ResponderEliminarun bestruenador :p
A mí me gustan las dos, pero supongo que los colores de la primera te gustan más.
ResponderEliminarPixel no sabía que te gustara tanto el otoño!! es una época que suele traer melancolía y tristeza ¡no sé por qué!
Besitos.
Sí, Tuqui, la Naturaleza sigue su curso igual que nosotros, paso a paso, día a día.
ResponderEliminarBesos!
¡Vivan las diferencias!
ResponderEliminarEnric, hay una variedad que no nos la acabamos ^_^
Besitos.
Jajaja, Elvira ¡qué gracia! pero yo creo que escuálido y todo es bonito.
ResponderEliminarMi amiga y vecina Rosa (que tiene la Mammillaria que mostré el otro día), guarda estas umbelas y las pone como adorno, todas juntas, en un tronco hueco de un viejo árbol ¡queda precioso!, a ver si me cuelo en su jardín y le hago unas fotos.
Besitos.
¡Hola Ramuol! ¡qué alegría tu vuelta! y yo despistada, como siempre, anticipándome, jaja...
ResponderEliminarEl año pasado, hice la entrada en hora y minutos exactos de la entrada del verano pero esta vez está claro que no.
Puedes verla aquí
verano 2009
Muchos besos!!
Rosa, se nota que me hacía ilusión que llegara y por eso me anticipé, jeje...
ResponderEliminar¿Has visto el enlace que hay en la palabra OTOÑO del texto?, pues échale una mirada y te sorprenderás.
Me paso en un periquete a dejarte mil besitos.
Pilar, el otoño también me gusta, más que nada porque resulta muy apacible y tranquilo ¡y los colores ocres y marrones son fantasticos!
ResponderEliminarDices bien, que se huele la hierba mojada y se escuchan las hojas romperse bajo los zapatos y nacen las setas ¡que este año dicen habrá muchas!
Muchos besos.
Kato ¡qué bonito lo que has dicho! es pura poesía, que no hay nada más satisfactorio que dar, señal de que se tiene.
ResponderEliminarMil besos tronadores para mi poeta!
¡hay madre mía! ¿que has hecho hija? yo digo: me da error, pincho y me sale mi blog, voy a ver pinchando en Agapanto flor del amor...y está correcto, vuelvo a pinchar y alaaa equinoccio, ah pillina, que ilusión me ha hecho ja ja.
ResponderEliminarEres un sol pero del de más horas, digamos de solsticio de verano..
Besicos
olá Montse
ResponderEliminarquando morava na casa antiga de meus pais, tinhamos muitas destas flores, nós a chamávamos de 'balões de neve' tinhamos nas cores branca e lilas, como este da foto.
agora, não temos mais nenhuma planta destas.
obrigada por me trazer boas lembranças de infancia, atraves destas imagens.
beso
¡Buenas! Hemos visto que este blog también participa en los premios 20 blogs y nos hemos pasado para echarle un vistazo, nosotros también nos presentamos en la categoría de viajes http://lablogoteca.20minutos.es/blog-de-viajesnet-331/0/
ResponderEliminarY no hemos querido irnos sin antes dejar un comentario.
Saludos y mucha suerte en el concurso, aunque la cosa está complicada...
Pues sí, el otoño es un seguir, no un morir, qué bonito Montse.
ResponderEliminarBesos,
Jajaja, Rosa, ya veo que te has sorprendido!!! ví tu post sobre el otoño y es tan interesante y tan hermoso que lo incluí en el mio.
ResponderEliminarGracias guapa, tu sí que eres un solete!
Rosan, me alegro que recordaras tu infancia, es la época más feliz y la que siempre nos acompaña.
ResponderEliminarUn enorme beso.
Gracias Viajes.net por pasar por aquí y dejarme un saludo. Me pasaré por el vuestro.
ResponderEliminarNo está nada fácil, es verdad, y espero que vosotros tengáis muchísima suerte ¡que nos quedan pocos días!
Saludos!
Khenai, los que amamos la Naturaleza no sólo la observamos sino que la sentimos y aprendemos de ella.
ResponderEliminarGracias a tí y muchos besos.
Bienvenid@ a Botanic Serrat
y muchas gracias por dejar tu comentario.