Bryophyta (briofitas) en sentido amplio, son plantas embriofitas no vasculares y su nombre proviene del griego byron o musgo y phyton planta. Descienden de las algas verdes y fueron las primeras en evolucionar y colonizar los espacios terrestres hace 420 millones de años.
Se deviden en tres grupos: musgos, hepáticas y antóceras y lo forman unas 24.000 especies distribuidas en 900 géneros que crecen en los climas fríos y muy húmedos de todo el planeta.
El musgo, que pertenece a la clase musci que es la más numerosa, consta de unas 15.000 especies distribuidas en más de 600 géneros y que se agrupan en tres grupos: bryales, sphagnales y andraeales.
Carecen de sistema vascular aunque poseen elementos celulares rudimentarios para la conducción de la savia. Su ciclo biológico predominante es el gametofito, es decir que las células de la planta son haploides (tienen un solo juego de cromosomas o la mitad).
La vida del musgo comienza a partir de una espora haploide que germina formando un protonema (órgano filamentoso) de donde crece el gametofito que se diferencia en caulidios y filidos. En los extremos de los caulidios se desarrollan los órganos sexuales, llamados arquegonios los femeninos y anteridios los masculinos.
Algunos musgos, sin embargo, pueden ser doicos y en otros se producen estructuras vegetativas llamadas gemas sobre los filidios, que pueden desprenderse y formar nuevas plantas sin la necesidad de recurrir al ciclo de fecundación y que constituye un método de reproducción asexual.
Muy comunes en áreas selváticas y en zonas de grandes precipitaciones o en los bordes de cursos de agua, desempeñan un importante papel en el ecosistema ya que retienen la humedad del suelo y evitan su degradación además de constituir un refugio de pequeños invertebrados.
Algunas especies incluso llegan a producirse en zonas urbanas entre las grietas de las calles con humedad o desarrollarse incluso en materiales como la madera y otras son enteramente acuáticas y habitan en los pantanos y canales de poco caudal.
14 comments
A mí el musgo es una planta que me gusta mucho.
ResponderEliminarValGarGon, en Japón hay bosques y jardines enteramente cubiertos de musgo, he visto unas fotografías impresionantes que seguro te gustarían, te dejo este enlace
ResponderEliminarmoss garden
Besitos!
Me hago pequeñita, veo inmensos árboles y me interno en ese bosque... Fabuloso.
ResponderEliminarHasta pronto Montse.
Qué lindo musguito Montse! dan ganas de pasarle la mano!, ví la foto también que le mostraste a ValGarGon, buenísima! Y yo con las ganas que tengo de bosque!!!
ResponderEliminarBesos :)
Chomp, me gusta esa forma de verlo, sólo siendo muy pequeñita se puede entrar en el fabuloso mundo del musgo ¡tiene que ser fascinante!
ResponderEliminarUn besito, guapa.
Axis, esos bosques verdes y frondosos son una maravilla ¡cómo me gustaría estar allí y que diéramos un paseo juntas!
ResponderEliminarUn beso.
Ah! serìa maravilloso Montse... caminata, fotos, hermosos descubrimientos y alegrìa, sì!!!
ResponderEliminarBesos :)
Los musgos crecen en sitios donde no hay contaminación. Es una forma de saber que el aire es puro.
ResponderEliminarSiempre me han gustado mucho.
Un beso.
Qué gusto tocar ese musgo
ResponderEliminarA mi el musgo me retrotrae a la infancia, cuando íbamos a buscarlo al bosque para hacer el "Pessebre" en Navidad. Me han dicho que en Catalunya está protegido... Montse, sabes si es cierto? Un abrazo
ResponderEliminarAxis ¡qué apetecible pintas el paseo!
ResponderEliminarBesitos, guapa.
Kissy, no sabía que fuera indicativo de ambiente puro, gracias por contarlo. Por la zona de mi jardín hay zonas en donde añun puede encontrarse musgo en invierno, pero el clima es más bien seco en general y no tiene el aspecto tan frondoso como este que encontré en Cantabria, así que me gusta saber que estoy en un lugar de poca contaminación ¡es estupendo!
ResponderEliminarUn besito, guapa.
Pixel, sí que estaba suave ¡y tan verde!
ResponderEliminarUn besito.
Lo mismo me pasa a mí, Dori, me recuerda a la Navidad de cuando era niña y también a cuando mi hija era pequeña y hacíamos el Belén.
ResponderEliminarEs cierto que es una especie protegida en Catalunya, porque está en peligro de extinción y es una pena ¿verdad?, el acebo también está protegido por el exceso de su recolección en Navidad, es el inconveniente de ser especies muy solicitadas.
Un besito.
Bienvenid@ a Botanic Serrat
y muchas gracias por dejar tu comentario.