CARACOL CHICO
Se conoce comúnmente como "caracol chico" y se consume habitualmente en Andalucía como tapa en los bares. Su nombre es Cernuella virgata, un pequeño gasterópodo terrestre europeo muy común en la Península Ibérica.
Encontré estas fotos de hace tiempo, buscando en mi archivo y, aunque ya hablé de él, me apetecía mostrarlo de nuevo. Se nota que es pequeño, está paseando en las hojas de mis calas!
Se parece mucho a otro caracol terrestre, que también es habitual en la Península Ibérica y en Europa, llamado Theba pisana, ambos tienen la concha de color blanco marfil de fondo y unas bandas espirales de color marrón oscuro de distintos tamaños muy marcadas.
La diferencia entre ellos es el ombligo que, en Cernuella virgata está cerrado mientras que en Theba pisana está abierto, lo que no deja de ser una buena pista para poder reconocerlos.
Es una pena que en mis fotografías no se aprecie el ombligo del caracol, pero os aseguro que se trata de Cernuella.
14 comments
It is not often that gardeners show us snails, with apparent affection! I know very little about gastropods other than that they are an important food source for many birds - and humans too it seems. This is a taxon that I would like to study more, but at this stage of my life doubt that I ever will. Interesting post, Montse. Un abrazo, David
ResponderEliminarDavid, more than a gardener I am an observer of the garden, and I am interested in all the contents, including the snails, I lose curiosity. I like to know that you find the world of gastropods interesting, of which I am not an expert.
EliminarA hug.
Muy guapo querida Montse, se parece al que hay aquí, esta noche observaré su ombligo, feliz fin de semana y muchos besos.
ResponderEliminar¡Sabía que te gustaría!
EliminarMi querida amiga, espero que ya hayas visto algún que otro ombligo de caracol ;)
Muchos besinos.
Aun sin ombligo bien guapo que ha salido
ResponderEliminarEste caracol era muy vergonzoso, a ver ti otro día encuentro alguno más atrevido que nos enseñe el ombligo ;)
EliminarUn abrazo, Joaquín.
Querida amiga Montse, me acabas de enseñar algo nuevo que desconocía en los caracoles, esa parte del ombligo que a partir de hoy la tendré presente. Para mi es una criatura graciosa y siempre que les veo los dejo a su aire me gusta su presencia por el jardín al igual que cualquier otro insecto, al fin y al cabo todos cumplen una misión importante en el mismo, unos más y otros menos, pero todos son de agradecer. Para que te hagas una idea de lo que me gusta su presencia, cuando llueve de las pocas veces que lo suele hacer y no veo ninguno por el jardín aprovecho en una parcela cerca de casa abandonada llena de matojos para coger algunos y dejarlos por mi jardín.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo querida amiga y como reza fa frase “nunca te acostaras sin saber una cosa más” gracias a ti.
Amigo Juan, me alegro muchísimo que te gusten los caracoles, ya sabemos que se comen las hojas de las plantas, pero como dices forman parte del ecosistema porque sirven de alimento a las aves y a los sapos. A mi me parecen simpáticos, siempre que no se conviertan en una plaga.
EliminarUn abrazo enorme!
Este creo que no lo he visto. Los caracoles no me gustan en el jardín, me comen las flores. Besitos.
ResponderEliminarTeresa, entiendo que no te gusten, pero yo veo pocos porque aquí llueve poco y me hacen mucha gracia.
EliminarMuchos besos!
Uno de los platos favoritos de mi abuela eran los caracoles pequeños guisados con tomate frito.
ResponderEliminarUn abrazo.
Sí, por lo visto esta especie es muy apreciada, aunque he comido caracoles y me gustan nunca he probado este caracol chico ¡con tomate tienen que estar muy ricos!
EliminarUn abrazo, amigo José.
Aqui andan comiendo las plantas,de comerlos a ellos ni hablo,guakala!!!abrazos.
ResponderEliminarFiaris, ya veo que no te gustan nada los caracoles!
EliminarUn abrzo grande.
Bienvenid@ a Botanic Serrat
y muchas gracias por dejar tu comentario.