CIPRES, el árbol de los cementerios
Foto Botanic Serrat (Cupressus sempervirens, L.)
Asociamos este árbol milenario, hay ejemplares con casi 1000 años de antigüedad, a una simbología fúnebre. No hay cementerio que no tenga plantado uno o varios ejemplares de ciprés entre las sepulturas, como si se tratara de un árbol nefasto recibiendo, injustamente, el nombre de “árbol de la muerte”, nada más lejos de la realidad.
El ciprés es el árbol de la vida que representa la regeneración y la inmortalidad, el nexo de unión entre la tierra y el cielo.
¿Por qué se le asocia con la muerte?
Vamos a descubrirlo…
Su porte esbelto y elevado, con una altura de hasta 30 metros, apuntando hacia el cielo y su longevidad, así como lo perenne de sus hojas siempre verdes y su resina incorrupta simbolizan la inmortalidad, como sucede también aunque en menor medida con el cedro, el pino y el abeto. Sus raíces profundamente arraigadas a la tierra, que antiguamente denominaban inframundo, sería otra de las características que vendrían a asociarlo a la vida eterna y a los muertos.
En la mitología griega, era símbolo de Apolo por su forma de llama de fuego y también simbolizaba algunas deidades femeninas. En la antigua Grecia se colocaban ramitas de ciprés como señal de duelo en las casas en donde había algún difunto.
Los romanos lo consagraron al dios Plutón, divinidad infernal, cuya frente se coronaba con su ramaje y le otorgaron el adjetivo de “fúnebre” que aún hoy conserva, lo plantaban junto a las tumbas honrándolo como símbolo de árbol inmortal. Por otro lado, le atribuían la virtud de repeler hechizos malignos por sus propiedades medicinales y cercaban las casas patricias con cipreses.
En el cristianismo, siguiendo el simbolismo de inmortalidad, se plantaban en los cementerios para ayudar a las almas en la búsqueda de la vida eterna y la resurrección.
La isla de Chipre, debe su nombre al ciprés, árbol al que rindió culto desde muy antiguo.
La cultura islámica también tuvo admiración por el ciprés, epitafios en las tumbas musulmanas de Anatolia (Turquía) están decorados por representaciones artísticas de cipreses. Durante el islamismo en Sicilia se plantaron numerosos cipreses, los cuales aún perduran y que pueden verse en el Jardín Botánico de Palermo.
En oriente, el género Thuya que se conoce como árbol de la vida y Cupressus (ciprés) están muy relacionados. En la antigua China se consumían sus semillas que contenían sustancia yang para tener una vida más larga. En Japón fabricaban el llamado shaku, cetro de los sacerdotes, con madera de la especie de ciprés japonés hinoki y también lo utilizaban para la construcción de templos, como el de Isé.
Todas estas manifestaciones culturales a lo largo de la historia nos revelan que el ciprés es realmente el árbol sagrado de la vida y la inmortalidad y que no tiene el sentido necrológico que le otorgamos.
Es posible que ahora, cuando contemplemos un hermoso y esbelto ciprés, lo veamos de una manera distinta…
19 comments
Yo lo entiendo como símbolo de "la nueva vida", por eso se coloca junto a las tumbas.
ResponderEliminarMuy interesante lo que cuentas.
Besos, guapa
Muy bonito el árbol, muy verde y curiosa la explicación.
ResponderEliminarnunca había asociado los cipreses con los cementerios...pero así es, los hay en todos.
ResponderEliminaren la casa en la que viví cuando recién me casé había tres enormes cipreses.allí jugaron mis tres hijos.
muy buena información,Montse!
besitos*
Muy interesante!!
ResponderEliminarme gustan los cipreses... dicen también que se sembraban en cementerios además por su intenso olor, que así enmascaraba el no tan agradable de la muerte ;(
ResponderEliminaren muchos de los lugares más emblemáticos de mi ciudad los hay, junto a la torre del Alcázar, en Medina Azahara, patio de los naranjos (creo)...
me gustan¡¡¡ majestuosos con su porte tan afilado¡¡¡
en Cabriñana no había ninguno... hasta que llegué yo, jejejeje.... que ya hemos sembrado unos cuantos a modo de seto....
besos
¡La vida y la muerte hacia el cielo
ResponderEliminarcreciendo en las ramas del ciprés!
Un beso que se admira de tantísima
información que cuentas del ciprés
En efecto, Elvira, se refiere a la vida eterna que hay más allá de la muerte, por eso es un símbolo de vida.
ResponderEliminarUn besito enorme, después de este largo fin de semana!
Viatger, tus aportaciones siempre son concretas y muy interesantes, no sabía de ese concepto que, desde luego, es mucho más científico que simbólico.
ResponderEliminarEsta información enriquece y afirma la teoría de que el ciprés no es un árbol "negativo" si además nos puede salvar la vida.
Molts petons, amic!
Pixel, te contaré un secreto... en principio este ciprés era un arbusto más de los que forman los setos, todos ellos son cipreses que se recortan, pero este último (está al final de todos) creció algo más y durante un tiempo que no pudimos atender el jardín se hizo tan alto que luego no alcanzábamos para podarlo y así se quedó, como un bonito árbol.
ResponderEliminarMe alegro de que te parezca interesante.
Mil besos!!
¡Qué curioso, Rayuela, a mí me pasa al contrario! siempre asocié el ciprés a los cementerios aunque también son árboles que adornan parques y jardines.
ResponderEliminarTres bonitos cipreses señalando el cielo debe de ser un bello espectáculo e imagino que te evoca muchos recuerdos de tus hijos ¡Ay, las madres, cómo somos, siempre pensando en los hijos!
Un beso muy grande.
Me aprece genial, ValGarGon, que sea interesante, a mi me lo parece pero no sé si a los demás les pueda parecer igual, por eso me alegra saber que te gusta.
ResponderEliminarBesitos!
Pilar, sí que hacen muy buen olor. No conocía que fuera por esa causa, pero tiene sentido!!
ResponderEliminar¿Así que tu sierra ya tiene cipreses?, pues me parece muuy buena idea ya que son ideales como setos, los que rodean mi jardín también lo son y uno de ellos se ha hecho un árbol enorme, del que he hecho la fotografía. Y además, ya sabes, es el árbol de la vida!!
Un beso grandote.
Enric, yo soy una enamorada de los árboles en general, pero tengo cierta preferencia por el pino y el ciprés, ambos simbolizan la vida y ambos se elevan al cielo como queriéndolo alcanzar. Veo que has tenido la misma visión que yo.
ResponderEliminarSaber de ellos nos hace contemplarlos de otro modo ¿verdad?
Mil besos, poeta.
Hola Montse,
ResponderEliminarno sólo la información que das es muy interesante, también lo que aportan tus comentaristas.
Lo que me gusta especialmente del ciprés es su maravilloso olor y el sabor de sus hojas, también me gusta su tacto, firme y suave que se puede apreciar muy bien en la primera foto.
Hoy me voy sabiendo un montón de cosas de este magnífico árbol.
Besos de altura*
Hola Ofelia,
ResponderEliminarEstoy de acuerdo contigo en cuanto al olor y al tacto, ambas cosas me gustan, pero nunca se me habría ocurrido comer sus hojas a pesar de que tienen propiedades expectorantes y diuréticas. ¡Voy a tener que probar!
Muchos besos, guapa.
Me encanta el reportaje sobre el cipres.
ResponderEliminarA nosotros nos parece un magnífico árbol poco valorado.
Con el objetivo de aportar un poco más de información, os adjunto 2 links sobre su simbolismo (una gran parte del mismo ya lo contiene tu reportaje), y sobre varias curiosidades de este magnífico árbol.
http://www.konalma.com/koncupressus-simbolismo.html
http://www.konalma.com/koncupressus-curiosidades.html
http://www.konalma.com/koncupressus-cuidados.html
Un saludo.
Hola Konalma, he visitado nuestra web y me parece una iniciativa original y con mucha sensibilidad.
ResponderEliminarVuestra frase inicial me ha parecido sencillamente genial y auténtica.
Gracias por los enlaces, es muy interesante saber el simbolismo y las curiosidades tanto del ciprés como del olivo y otras especies.
Un abrazo.
Muy interesante, no sabía muchas de las cosas de los cipreses. Yo estoy últimamente enganchado a todo tipo de blogs de decoración de jardines como el que os he pasado y la verdad es que me entretienen mucho y se aprende un montón. Por cierto, no sabía que la tradición de los cipreses viniera de la época Grecorromana
ResponderEliminarNunilo, me alegro que te haya gustado saber más sobre el ciprés.
ResponderEliminarSe aprende mucho de los demás, y como que estoy interesada en la decoración, me paso por este que mencionas ¡a ver si me engancho yo también!
Un abrazo.
Bienvenid@ a Botanic Serrat
y muchas gracias por dejar tu comentario.